¿Quién no ha sentido alguna vez el gusanillo de ser escritor? ¿Quién no se ha visto inesperadamente asaltado por la inspiración, forzado, de algún modo, a poner por escrito una idea, una imagen, una fantasía? ¿Quién no ha soñado con ver su nombre decorando la portada de un grueso volumen en tipografía elegante? ¿Quién no se ha imaginado alguna vez, como esos grandes nombres de la literatura universal, recogiendo el Premio Nobel de manos del rey de Suecia? Como volar o ser invisible, la escritura es, al mismo tiempo, una de las grandes ansias y una de las más terribles pasiones que asolan todo ser humano. Se trata de un arte íntimo, mínimo, pero capaz de una fuerza que desafía a cualquier otra manifestación estética. Escribiendo somos libres, somos héroes, somos criaturas imposibles... Escribiendo tenemos cualquier cosa al alcance de la mano; y, bien sujeta, podemos compartirla con todo el mundo. Puede que aquí no se encuentren nuevos Homeros, Cervantes ni Shakespeares; no es ese nuestro objetivo. Sólo queremos pasarlo bien y aprender unos de otros mientras nos nostramos (y demostramos) lo que llevamos dentro.
¡Un saludo!
H & S
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