La pobre hormiguita Anacarda, paseaba entre las setas del húmedo jardín. Saltaba de seta a seta, impulsándose con sus pequeños pares de patitas escuálidas y entonces...
- ¡Eh! ¿Dónde vas diente de león? - dijo extendiendo los brazos para alcanzarlo - ¿De verdad es tan divertido subir para al final bajar? - gritó un poco al verlo como se elevaba más y más - ¿Y merece la pena? ¿Es divertido?
- ¡Eh! ¿Dónde vas diente de león? - dijo extendiendo los brazos para alcanzarlo - ¿De verdad es tan divertido subir para al final bajar? - gritó un poco al verlo como se elevaba más y más - ¿Y merece la pena? ¿Es divertido?
Tras esta conversación - que fue cortinilla y epilogo de un monologo abierto - pensó y pensó hasta dibujar con sus antenas un ciclón en la arena. Anacarda, ahora doctorada en ciencias de la diversión y entrenamiento, inventó la segunda función del filtro de arena. " Si el agua nos da miedo, la arena será nuestro terreno "
La cinta inaugurarla del gran tobogán de arena, fue cortada por las 500 hijas de Anacarda, quienes recibieron pase de por vida; Todo es mucho más sencillo.
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